Imagen de marca de Corders Cantabria.
La marca no ha de tener relevancia en sí misma. La importancia está en el mensaje.
La marca tiene que ser adaptable a cualquier contexto. Esto hará que se integre fácilmente con el mensaje.
La marca ha de contar con elementos característicos que hagan que, tras un primer vistazo, se pueda reconocer en todo momento.